2011 vaig tenir el plaer d´escoltar a Ernesto Jodos a Rio Quarto, Córdoba (Argentina), acompanyat per la meva parella, millor que sigui ella amb les seves paraules qui ens parli sobre el seu últim disc. Manel               

    ERNESTO JODOS –FRAGMENTOS DEL MUNDOBLUEART-2011   

“Los mejores músicos de jazz siempre han sabido tomar el aportede  sus             propias raíces para enriquecer la música e imprimirle una dirección personal”    Marc Copland.

Con orgullo les presento  a este compatriota, el pianista  argentino, Ernesto Jodos, para su última producción discográfica: “Fragmentos del mundo”

Ernesto Jodos es, no sólo uno de los principales músicos actuales de Argentina, sino uno de los más influyentes. En el campo del jazz, casi todos los pianistas del país situados en una primera línea  han sido sus discípulos.

Es un músico que surgió de aquella generación de jóvenes talentosos del jazz en la ciudad de Buenos Aires, a principios de los 90. Su música está claramente enmarcada dentro de la tradición de Jazz, usando la improvisación como el elemento más importante, pero también está influenciada por la música clásica y la música argentina .

El joven sello discográfico que lo produce, por tercera vez, también es otro motivo de orgullo: BlueArt, una dedicada discográfica especializada en jazz  que nace  en las márgenes del Río Paraná, en la ciudad de Rosario  y que acompaña sus cuidadas producciones musicales con otras, igualmente cuidadas,  de diseño de portadas de discos.

“Fragmentos del mundo”, es un álbum grabado en formato doble trío: Jerónimo Carmona y Mauricio Dawid, en contrabajos, y Sergio Verdinelli y Luciano Ruggieri, en baterías.

Los cuatro, son jóvenes músicos de la escena jazzística argentina y dos de ellos (Carmona y Verdinelli ) destacan en otros campos, como el rock o la música contemporánea.

A decir verdad, son los dos tríos con los que Jodos tocaba de manera alternada (con Jerónimo Carmona y Luciano Ruggieri, por un lado y con Mauricio Dawid y Sergio Verdinelli, por el otro), esta vez juntos. En tanto el pianista es siempre el mismo. Se trata finalmente de un quinteto con dos contrabajos y dos baterías.

Jodos se encarga de aclarar, sin embargo,  que no es un quinteto sino dos tríos que ejecutan de forma independiente. No es un concepto nuevo. Desde otro campo que no es el jazz, viene a la memoria de todos nosotros el más famoso de los doble trío: King Crimson.

El grupo dobla la apuesta del trío clásico: dos contrabajos y dos baterías, si bien, como se ha dicho,  no son dos tríos ya que el piano está siempre interpretado por Jodos: ¿Acaso una ampliación del concepto de doble trío?  En este caso, se mantiene  la centralidad del piano. Eventualmente uno de los contrabajos puede llevar arco y, con ello, una forma melódica más nítida, como en “El cristal de los otros”

Jodos es el autor de 11 temas de su nuevo disco: “Ll# 0”, “Un viaje”,  “Punto ciego”,  “Sir Charles”( dedicado al trompetista y compositor de Florida, de quien fuera su partenaire en el Festival de jazz de Buenos Aires en el 2011), “El cristal de los otros”,  “Creer-sentir”, “Ll# 6”, “Jaula de la luz”, “Un camino en el sueño”, “Ilusión” y “(Propio)fragmento del mundo” y reinterpreta una composición de Thelonious Monk: “Introspection”. Este es un  hecho digno de destacar en estos tiempos en los que hasta los grandes músicos se dedican a editar “nuevos”  trabajos integrados en su mayoría por “covers propios” y “covers  ajenos”

 Los músicos tocan simultáneamente sólo en cuatro de los doce temas que componen este álbum.  Uno de ellos es  el tema de Monk, una interpretación formidable, a cargo de los cinco músicos, en el que Jodos logra estirar la duración de la versión original desde los  3,14 a los 5,29 minutos, a fuerza de improvisar sobre la base instrumental del tema pero dejando reconocer claramente su melodía

Durante el transcurso de las 12 composiciones, el oyente, se deja sorprender sin decaer su entusiasmo. Hay composiciones y desarrollos más  jazzísticos, como “Punto ciego” o “Fragmentos del mundo”, hay otros que transcurren en una frontera más extraña, como “Un viaje” (para “doble” trío, también interpretada por los cinco músicos) y aquellas que están influenciadas por el folklore instrumental argentino: “Un camino en el sueño”

No es necesario decir más. El disco invita a curiosear  la obra de este autor y  la de otros producidos por su  discográfica: Blueart.  Si vale la expresión: El agradable y diferente sabor de la desglobalización   del (buen) jazz.

                       Liliana de la Mota

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